Ante los primeros síntomas de un resfriado o una gripe acudimos a la farmacia para que nos den el mejor antigripal para que acabe con estos síntomas tan molestos. Sin embargo, hay que ir con cuidado porque no todos podemos tomar los mismos antigripales. Un antigripal está compuesto por dos o más principios activos, y algunos de ellos están contraindicados en ciertas patologías o rango de edades.
Si tienes más de 65 años, tienes hipertensión arterial, alguna enfermedad cardíaca, enfermedad respiratoria, problemas de hígado o riñón, eres diabético, tomas anticoagulantes o cualquier otra enfermedad, debes comentárselo a tu médico o farmacéutico antes de tomarte un antigripal.
Contraindicaciones por principio activo de los antigripales ¿Todos los antigripales tienen lo mismo?
- Ácido acetilsalicílico: Es un Antiinflamatorio No Esteroideo (AINE) que puede producir gastrolesividad. Está contraindicado en casos de:
- Úlcera gastroduodenal activa, crónica o recurrente y en caso de molestias gástricas repetidas.
- Historia previa de hemorragia o úlcera por el uso de ácido acetilsalicílico u otros AINEs.
- Hipertensión arterial no controlada. El ácido acetilsalicílico disminuye el efecto antihipertensivo de los IECA y ARA II (Enalapril, Lisinopril, Valsartán, Losartán, etc.).
- Combinación con alcohol. El uso combinado de ácido acetilsalícilico junto con alcohol aumenta el riesgo de sufrir hemorragias gástricas.
- Pacientes asmáticos, o en caso de sufrir ataques asmáticos por el uso de AINE.
- Pacientes anticoagulados, son más propensos a sufrir hemorragias al tomar ácido acetilsalicílico.
- Niños menores de 16 años, por el riesgo de sufrir el Síndrome de Reye.
- Ibuprofeno: También es un AINE que tiene las mismas contraindicaciones que el ácido acetilsalicílico.
- Paracetamol: Es un medicamento con actividad analgésica para tratar el dolor leve a moderado, y con actividad antipirética para controlar la fiebre. Está contraindicado en casos de:
- Consumo junto con alcohol, el uso combinado de alcohol y paracetamol aumenta la hepatoxicidad de ambos.
- Pacientes anticoagulados, el paracetamol potencia el efecto de los anticoagulantes y como consecuencia el riesgo de sufrir hemorragias.
- En caso de anemia, afecciones cardíacas o pulmonares, disfunción renal o hepática se tomara durante el menor tiempo posible y bajo supervisión médica.
- Clorfenamina: Antihistamínico que evita la secreción nasal, los estornudos y el lagrimeo típico del resfriado común. Su efecto adverso más común es la somnolencia por lo que deberá evitarse en casos de:
- Trabajo con maquinaria pesada.
- Conducción de vehículos.
- Combinación con alcohol.
- Pseudoefedrina: Medicamento con acción agonista adrenérgica que produce vasoconstricción y por eso se utiliza para tratar la congestión nasal. Está contraindicado en caso de:
- Hipertensión arterial: al producir vasoconstricción puede aumentar la presión arterial por lo que no debería utilizarse en personas con tensión arterial alta.
Si sufres de una patología de base, muchas veces es mejor tratar los síntomas por separado. No obstante, si tu caso es alguno de los anteriores la mejor opción es acudir a tu médico para que valore la mejor opción para ti o se lo comentes a tu farmacéutico antes de tomar cualquier antigripal. Si después de leer este post tienes dudas de que antigripal es el más adecuado para ti puedes preguntarnos a través de nuestro WhatsApp.