¿Conoces cómo la fabrican las abejas? ¿La composición de la que nos podemos beneficiar? Descubrélo todo aquí…
La jalea real es un alimento extraordinariamente rico en nutrientes de fácil asimilación por nuestro organismo. Gracias a su composición posee múltiples aplicaciones terapéuticas, y es una fuente de energía y vitalidad para personas de cualquier edad.
A diferencia de otros productos que producen las abejas, la jalea real es de origen endógeno, es decir, que está fabricada en el interior de su organismo. Es una de las sustancias más completas y nutritivas de origen natural.
Se trata de un líquido blanquecino-amarillento, con pH y sabor ácido, segregado por las glándulas mandibulares y las hipofaríngeas de las abejas obreras cuando disponen de los nutrientes necesarios para poder sintetizarla (miel, agua y polen).
El ácido 10-hidroxidecenoico (10-HDA) es sintetizado por las glándulas hipofaríngeas y el ácido 9 oxodecenoico por las glándulas mandibulares, entre una variada mezcla de ácidos grasos.
El ácido 10-hidroxidecenoico (10-HDA), es el ácido graso más importante a la hora de indicarnos la calidad y frescor de la jalea real, siendo responsable de muchas de las propiedades beneficiosas de la jalea en nuestro organismo. Para considerar que una jalea real es de buena calidad debe contener un mínimo del 1’8% de 10-HDA, por eso siempre es recomendable adquirir productos con jalea real estandarizados,donde se indique la cantidad exacta de ácido 10-hidroxidecenoico presente en cada dosis.
Entre los nutrientes más importantes que podemos encontrar en la jalea real se pueden destacar los siguientes:
· Proteínas: Presenta un alto contenido en proteínas incluyendo aminoácidos esenciales para nuestro organismo.
· Vitaminas: Entre las liposolubles predominan la vitamina A, la D y la E; y entre las hidrosolubles, la vitamina C y las del grupo B.
· Minerales como el hierro, calcio, potasio, sodio, magnesio, cobre, silício y fósforo.
· Vitamina PP o nicotinamida: Ejerce una acción vasodilatadora sobre los capilares sanguíneos, mejorando la circulación y previniendo la arteriosclerosis debida al envejecimiento.
· Ácidos grasos.
· Hidratos de carbono.
· Biotina, inositol y ácido fólico.
· Ácido pteroiglutámico: Favorece la proliferación de los glóbulos rojos, disminuyendo las posibles anemias.
· Agua.
Ahora que ya sabemos qué es realmente la jalea real y su extraordinaria composición, sólo nos falta aprovechar los magníficos beneficios que nos puede aportar éste regalo de la naturaleza.
Seguro que nuestro organismo nos lo agradece…